Con esta entrada inauguro una nueva sección en este mi blog, análisis de los anuncios que encontramos cada día en nuestros hogares. Pueden ser análisis críticos puramente destructivos, que busquen la finalidad real y oculta del anuncio, o simplemente anecdóticos.
Hoy hablaremos del típico anuncio del Club Zed.
Hablo de ese anuncio en el que aparece un chaval de veintitantos años con una mujer de edad similar que dice "flipar" con los tonos del móvil de su amigo.
Este anuncio no sólo es patético por la forma penosa de actuar de estos dos individuos, no sólo es patético por las expresiones descentradas que utilizan como "ir a la última", sino por la irrealidad que pretenden mostrar situando a universitarios hablando y actuando como adolescentes tempranos de una forma exagerada.
El argumento principal de persuasión se basa en la idea de que los adolescentes ingenuos que accederían ciegos a este tipo de servicio, tienen como objeto de imitación a los jóvenes adultos.
En su deseo de ser mayores, pretenden adquirir los artículos adultos cada vez más temprano (móviles, zapatos de tacón, tabaco, tarjeta de crédito...). En este anuncio pretenden hacer creer que los jóvenes adultos con dos dedos de frente perdemos el tiempo con salvapantallas, fotografías o dibujitos animados para el móvil suscribiéndonos a un servicio que, además de ser una estafa, no proporciona nada más que porquería par el móvil.
El adolescente ingenuo creerá que es más mayor o que va "a la última" enviando ALTA al 5115, lo que le succionará 0.30€ al día por el resto de su vida.
Si ya la idea de por sí no es lo suficientemente patética, encima utilizan el tan recurrido objeto de la seducción como reclamo. La joven del anuncio se muestra seducida por los accesorios que su chico ha adquirido mediante este servicio. Esto da una imagen distorsionada de la realidad, me gustaría ver como una chica cae rendida a los brazos de alguien por tener un tono en el móvil en el que sale un pibe diciendo chorradas. Por desgracia la televisión muestra parte de realidad, una realidad que ella misma crea, atrayéndonos desde pequeño con estos estándares desgraciadamente penosos para nuestra sociedad.
Los actores del anuncio no se esfuerzan en ningún momento por ocultar lo irreal e infantiloide del guión, pero puede que algún día nos encontremos gente así en la vida real. Es así de triste.
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1 comentario:
Estoi totalmente de acuerdo contigo en que la verdad no se estrujan mucho los sesos los del club zed tanto como en otros millones de anuncios que los piensas y dices pero que pollas hacen?...Yo no me iria de tras de un tio porque tenga un sonido en el movil k sea lo ultimo...Podrian hacerlos un poco más realistas.!Pero como el del club zed nos encontramos el del empujoncito de la cuenta naranja de ing-direct,u otros tantos .....Y si no el de oraldine...que falsos dios! O cambian a los actores,o el guion o lo que sea....pero vamos eso nos demuestra lo mal que está la television en nuestros dias...!!Luego no quieren que nos enganchemos a internet...si esque para lo que hay que ver..
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